Muévete

Es fácil perder la esperanza. No obstante, es importante no pararse nunca, evolucionar, formarse y estar siempre alerta. Muévete.
¿A qué me refiero? El trabajo que tenemos por delante siempre es arduo. Yo mismo, en mi oficio de vender productos, hacer marketing y escribir para posicionar tengo momentos de profundo desaliento. A veces observas que las cosas no avanzan tanto como te gustaría o las campañas no tienen el eco que tanto te has trabajado. Pero no desistas. Muévete.
Una cosa que tienes que tener siempre clara es que los resultados están ahí, en alguna parte. Solo tienes que buscarlos con ahínco. Cuanto más sepas del tema, más formado estés y más esfuerzo y pasión impliques en tu trabajo, mejor. Al final, tarde o temprano, todo llega. Solo hay que querer con ganas renovadas y no desesperar. Muévete.
Todas las mañanas me levanto temprano y me siento delante de mi pantalla a observar y estudiar resultados, campañas y demás movimientos. Unos días me alegro porque me gusta lo que veo y otros, no tanto. Pero no me rindo. No desisto. Trabajo sin descanso para lograr lo que quiero y estar donde tengo que estar. Siempre adelante. Muévete.
Hoy, por ejemplo, me he levantado de un salto mortal. He visto que la asesoría AME había recibido más visitas que nunca en un día. Eso me ha llevado a mejorar la página, hacerla más visual, atractiva y sencilla para su navegación. ¿A qué esperas? Muévete.
Eso es todo lo que te puedo decir. Si no estás a gusto en un sitio. Muévete. Si crees que te mereces algo mejor, esfuérzate por conseguirlo y muévete. Si tienes un sueño en la vida, ve a por él y muévete. Nunca te quedes parado, pues languideces hasta desesperar. Siempre adelante, en movimiento. Muévete.